Juan Calvino nació en Noyón en el año 1509 y es el promotor, el teórico y el jefe de la Reforma en los países de lengua francesa, y de la misma forma que Lutero en los países de habla germánica, Calvino es en Suiza, Francia y toda la Europa occidental respecto a la Iglesia reformada.
A los doce años recibió un pequeño beneficio eclesiástico y en aquella ocasión obtuvo la clausura. Luego fue a París a estudiar gramática, latín, teología y filosofía siendo un estudiante serio, dócil y algo triste. Cuando tuvo dieciocho años consiguió un curato. Pero ese mismo año se rebela contra su propia vocación y contra el dogma que está estudiando, dejando París y yendo a Orleans y luego a Bourges, lugar que era el centro de las actividades luteranas.
Por ese entonces a Calvino las enseñanzas de la iglesia le parecen corrompidas y se cree encargado por Dios de una misión que la compara con la de los antiguos profetas. Y desde este momento su vida queda íntimamente ligada a sus propias actividades.
En el año 1535 hace fijar en Orleans unos pasquines contra la misa. El rey ordena diligencias judiciales contra los reformistas y las hogueras se encienden para castigar a los herejes, por tal motivo Calvino huye y se refugia en Estrasburgo donde redacta La institución cristiana. Más tarde va a Ginebra, lugar que para que Calvino será la Roma del reformador.
Los habitantes de Ginebra le confían el trabajo de redactar una constitución, donde él establece cuatro órdenes: los pastores, los doctores, los ancianos y los diáconos para poder definir "el modo de vivir para saber cómo deberá comportarse cada uno según Dios y la justicia".
El consistorio o tribunal de costumbres llamaba todas las semanas a los pecadores públicos y esta medida se complementó muy pronto con un código extremadamente riguroso, con pena de muerte contra el idólatra, el hereje o el adúltero. Además se admite la tortura durante los interrogatorios, existiendo de tal forma muchos abusos y excesos ya que Calvino, entre otras cosas, mandó instruir procesos inicuos en el curso de los cuales se descuartizó a simple testigos.
En el año 1542 publicó su Catecismo de la Iglesia de Ginebra entre muchas otras obras.
Este jefe de secta, tanto se presentaba como un erudito y un sabio atento a la inflexibilidad de los textos, como un adaptador parcial y desenfadado.
Se erigió en el portavoz del antipapismo, pero en Ginebra se comportaba como un pontífice tiránico. Si bien apartó de la obediencia romana a millones de cristianos tibios o descontentos, su ardor polémico provocó una serie de controversias que durante más de un siglo reanimaron el celo y consolidaron la doctrina de los defensores de la verdadera fe.
El 27 mayo de 1564 luego de haberse despedido de los magistrados y doctores de la ciudad que él quiso perfecta y dejó políticamente dividida, Calvino murió a los cincuenta y cinco años.