LA CALUMNIA: IMPACTO Y REPERCUSIONES EN LA REPUTACIÓN
La calumnia afecta la reputación de los demás y es una falsa acusación siempre acompañada de la mentira. Este pecado, cometido con intención de dañar, se considera un pecado moral que exige acción de detractar.
DIFERENCIAS ENTRE CALUMNIA Y ULTRAJE
La calumnia difiere del ultraje, ya que se ejerce contra un ausente y, en principio, inocente, mientras que el ultraje se dirige contra el honor de una persona presente. Esta distinción es crucial para comprender la naturaleza del daño que causa cada uno de estos actos.
La calumnia constituye un pecado formal cuya gravedad está en proporción con la medida en que afecta la reputación de los demás, violando las dos virtudes de veracidad y justicia.
La magnitud del daño es un factor determinante para evaluar el impacto de este pecado en la sociedad.
IMPACTO DE LA CALUMNIA EN INSTITUCIONES
Si bien, generalmente, la calumnia tiene que ver con las personas, también se puede dirigir a instituciones o sociedades civiles o religiosas. Este tipo de acusaciones a menudo puede surgir de un odio sectario. En cualquiera de estas formas, la calumnia siempre exige una reparación y una retractación.
La retractación, en principio, debe tener la misma publicidad que la calumnia, y la obligación de la reparación cesa cuando el calumniador expone su propia vida por ello. Esta regla refleja la seriedad con la que se debe abordar el acto de calumniar.
DEFENSA DE LA REPUTACIÓN PERSONAL
No existe obligación absoluta de defender la propia reputación cuando es calumniosamente atacada. Sin embargo, si esta reputación personal está vinculada a deberes de estado cuya pérdida ocasionaría perjuicios considerables para la familia, entonces es un deber exigir una reparación.
La forma de reparación varía según si la ofensa ha sido pública o privada, y es un acto de caridad hacia aquellos que no disponen de los medios necesarios para defenderse. Esta variabilidad destaca la adaptabilidad en las respuestas ante la injusticia.
PECADO VENIAL O MORTAL
El pecado cometido al realizar una calumnia no necesariamente tiene que ser mortal, en algunos casos, puede llegar a ser un pecado venial cuando la calumnia es insignificante o se considera trivial y no afecta a nada ni a nadie.
Sin embargo, lamentablemente, la mayoría de las calumnias producen graves daños a la víctima, y muchas veces, la reparación nunca se lleva a cabo.