EVANGELIZAR: UNA FORMA DE AYUDAR A JESÚS
La evangelización es una tarea fundamental para aquellos que siguen a Jesús. Él mismo llamó a sus amigos para que se convirtieran en apóstoles y llevaran su mensaje al mundo.
Ser católico no solo implica seguir los enseñanzas de Cristo, sino también transmitirlas a los demás.
Evangelizar es una forma especial y valiosa de amar a Jesús y ayudarle en su misión de difundir el evangelio y no debemos subestimar el impacto que podemos tener al compartir su mensaje con los demás.
Aunque la labor evangelizadora puede presentar desafíos, debemos confiar en la ayuda y la guía del Espíritu Santo, pero.. ¿cuál es la importancia de la evangelización y cómo podemos llevar a cabo esta tarea valiente y necesaria?
- ¿QUÉ ES LA EVANGELIZACIÓN?
La evangelización es el acto de compartir el mensaje de Jesús y su amor salvador con aquellos que aún no lo conocen o no han aceptado su enseñanza.
Es una invitación a encontrarse con Dios y experimentar su amor y misericordia.
En palabras simples, es llevar la buena nueva de Jesús a todas las personas, sin importar su edad, género, religión o posición social.
- EL MANDATO DE EVANGELIZAR
Jesús encomendó a sus apóstoles la tarea de evangelizar y propagar su mensaje por todo el mundo.
En el Evangelio según San Mateo (Mateo 28:19), Jesús les dice:
"Vayan, y hagan que todos los pueblos sean mis discípulos, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo"
Este mandato no se limita a los apóstoles de hace dos mil años, sino que también nos concierne a nosotros hoy en día. Como seguidores de Jesús, tenemos la responsabilidad de compartir su mensaje y hacer discípulos en todas las naciones.
- LA IMPORTANCIA DE LA EVANGELIZACIÓN
La evangelización es vital para el crecimiento y la continuidad de la Iglesia, ya que sin ella, el mensaje de Jesús no llegaría a las personas que más lo necesitan.
A través de la evangelización, podemos ayudar a otros a encontrar un sentido de propósito y esperanza en sus vidas.
Además, al compartir la fe, fortalecemos nuestra propia relación con Dios y consolidamos nuestra identidad como cristianos.
- SUPERANDO LOS DESAFÍOS DE LA EVANGELIZACIÓN
Evangelizar no siempre es fácil pues encontraremos desafíos y obstáculos en el camino, sin embargo, no debemos dejar que esto nos desanime.
Jesús nos prometió su presencia y su Espíritu Santo para fortalecernos en nuestra labor evangelizadora.
Debemos confiar en su ayuda y seguir adelante con valentía y determinación.
- EVANGELIZAR A OTROS DESDE LA INFANCIA
La evangelización no es exclusiva de los adultos o de los sacerdotes. Incluso los infantes pueden ser evangelizadores en su entorno.
Es importante que desde temprana edad aprendan a ser apóstoles de Jesús, compartiendo su fe con sus compañeros de escuela, amigos y familiares. Pueden hacerlo de manera sencilla, invitando a rezar cuando hay problemas o compartiendo lo que han aprendido en la catequesis.
Si aprenden a ser apóstoles desde pequeños, lo llevarán en su corazón durante toda su vida.
- LA EVANGELIZACIÓN COMO ACTO DE AMOR A JESÚS
Evangelizar es un acto de amor hacia Jesús. Al compartir su mensaje, estamos cumpliendo con su deseo de que todos conozcan su amor y su salvación. Nuestra labor evangelizadora tiene un propósito más amplio que nuestras propias vidas, ya que nos permite ser colaboradores de Jesús en su obra redentora.
No debemos conformarnos con guardar nuestra fe para nosotros mismos, sino que debemos compartirla con generosidad y alegría. Por lo tanto, es nuestra responsabilidad llevar el mensaje de Jesús a aquellos que nos rodean y enseñarles lo que hemos aprendido. Cada encuentro es una oportunidad para compartir el amor de Dios y marcar la diferencia en la vida de los demás.
Al evangelizar, estamos amando a Jesús y cumpliendo con su mandato de hacer discípulos en todas las naciones. Sigamos adelante con valentía y determinación, sabiendo que nuestra labor tiene un propósito eterno.