LA VERDADERA CONVERSIÓN ESPIRITUAL: LA IMPORTANCIA DE LA SANTIDAD EN NUESTRAS PETICIONES
La conversión y la búsqueda de la presencia de Dios en nuestras vidas son aspectos clave para acercarnos a Él, por eso es importante evitar enfocarnos en cosas materiales y buscar primero el Reino de Dios y su justicia.
No hay que temer pedirle al Señor que nos ayude a vencer nuestros defectos y pecados.
- LA SANTIDAD COMO PRIMER INGREDIENTE
Nuestra oración de petición al Señor debe tener la santidad como primer ingrediente, que es lo que más debemos desear.
La conversión en la petición debe incluir no sólo la forma en que se hace, sino también el contenido de la misma. Por lo tanto, debemos pedir a Dios el don de la santidad para nosotros mismos y para los nuestros.
Es importante que mantengamos esta petición como nuestra prioridad, en lugar de centrarnos en otros aspectos que no sean la santidad. Si lo hacemos, estaremos más cerca de alcanzar nuestros objetivos y de acercarnos al Señor.
Debemos recordar que la santidad es el estado de ser puro y justo, y al buscarla activamente, estamos alineando nuestros corazones y mentes con la voluntad de Dios. No es una tarea que pueda tomarse a la ligera, sino que requiere un esfuerzo y una dedicación intencionados por nuestra parte.
- EVITAR LA BÚSQUEDA DE COSAS MATERIALES
Cuando nos enfocamos en la obtención de cosas materiales, estamos alejándonos de nuestra verdadera conversión espiritual. Esta conversión es el camino que Dios nos pide seguir para llegar a Él.
Cuando seguimos ese camino, no hay necesidad de pedir cosas materiales, por el contrario, la sola presencia de Dios en nuestras vidas es suficiente para satisfacernos. La búsqueda de las cosas materiales nos distrae de nuestra relación con Dios, y esto es algo que no debería suceder. Por esta razón, debemos tener cuidado de no caer en la trampa de pedirle cosas materiales a Dios y centrarnos en la conversión espiritual y en la búsqueda de la presencia de Dios en nuestras vidas.
- BUSCAR PRIMERO EL REINO DE DIOS Y SU JUSTICIA
Cristo nos enseñó una importante lección acerca de la justicia de Dios: "Buscad primero el Reino de Dios y su justicia y lo demás se os dará por añadidura". Esto significa que debemos poner a Dios en primer lugar en nuestras vidas y buscar su justicia sobre todas las cosas. Esto no solo significa actuar con justicia, sino también vivir una vida santa. De esta forma, estamos buscando el Reino de Dios y su justicia.
Debemos tomarnos a pecho estas palabras de Cristo y esforzarnos por hacer de la santidad nuestro principal objetivo en la vida y reconocer que todos los dones de este mundo son efímeros, pero el don de la santidad es eterno.
Debemos convertir en nuestro objetivo la búsqueda de la santidad, y utilizar todos los recursos de que dispongamos para acercarnos a ella, sólo cuando lo hagamos experimentaremos realmente el poder de la gracia de Dios en nuestras vidas.
- PEDIR AL SEÑOR QUE NOS AYUDE A VENCER LOS DEFECTOS Y PECADOS
Es por eso que debemos pedir al Señor que nos ayude a vencer los defectos y pecados, pues esta es la forma de buscar el Reino de Dios y su justicia, y así podemos ser más conscientes de nuestra relación con Dios y trabajar para lograr la santidad. Esto nos permitirá ver los resultados de la justicia de Dios en nuestras vidas y nos ayudará a vivir de acuerdo con su voluntad.
La verdadera conversión no es un simple cambio de comportamiento, sino una transformación profunda y duradera del corazón y de la mente, y sólo a través de esta transformación podemos experimentar verdaderamente el poder de la gracia de Dios.
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