ORACIÓN PARA SANAR EL ALMA DE VICTOR MANUEL FERNANDEZ
Esta oración fue publicada por el Padre argentino Víctor Manuel Fernández en su libro "Un estímulo todos los días (propuestas para vivir mejor)".
El padre Fernández nació en la provincia de Córdoba, Argentina.
Realizó la licenciatura con especialidad bíblica en Roma y se doctoró en teología en la Universidad Católica Argentina.
Fue párroco, director de catequesis, asesor de movimientos, fundador de un instituto de formación laical, perito de varias comisiones del Episcopado Argentino, colaborador en el Celam en el ámbito de la reflexión teológica y pastoral, presidente de la Sociedad Argentina de Teología, vicedecano de la facultad de teología de la UCA y rector de la Pontificia Universidad Católica Argentina, entre otros
"Dios mío, dentro de mí persisten muchos temores que me debilitan.
Tengo miedo a crecer, a ser adulto, a ser maduro.
Le tengo miedo al paso de los años.
Ayúdame a mirar con serenidad cómo pasa el tiempo, y a valorar lo bello de cada edad y de cada nueva etapa.
Sopla con tu cálida brisa en ese miedo que tengo a la soledad, al abandono, a o tener quién me acompañe y me cuide, a quedarme sin las personas que me dan afecto.
Ayúdame a experimentar tu compañía y tu amor, que es más real que cualquier otra presencia.
Cura todo miedo al fracaso, a las humillaciones, a las críticas, a los comentarios ajenos.
Lo que importa es cómo me miras tú, que siempre me miras con ternura.
Sana también mi miedo a tomar decisiones, mi temor a equivocarme.
Dame más confianza en los dones y capacidades que tú has puesto en mi, y sobre todo en tu luz y en tu guía.
Sana también mi miedo a los cambios, a los imprevistos, a las cosas que yo no pueda controlar.
Toma mi temor a la enfermedad, al sufrimiento, a la muerte.
Toma mi miedo a ser limitado.
Toma todo miedo a la pobreza, a las personas, al futuro, y todo otro temor que me perturbe y gaste inútilmente mis energías.
Señor, rodéame con tu infinita gloria para que sepa salir adelante en medio de mis dificultades.
A veces te tengo miedo a ti, mi Dios, porque no te conozco, y otras veces siento que tu presencia puede quitarme algo.
Sana ese miedo, Señor, y ayúdame a descubrir que no eres como yo a veces te imagino.
Tú solo deseas mi bien y mi felicidad.
Dame tu fortaleza y también reafirma mi interior para que sea capaz de afrontar con calma todo lo que me suceda.
Porque todo lo que me pase puede ser para mi bien si te lo entrego con confianza.
Gracias, Señor.
Amén"
Cuando el miedo y la inseguridad golpeen a tu puerta, no dudes en rezar esta oración tal como está o usándola como inspiración para hablarle a Dios con tus propias palabras.
Hoy es
