Cómo afecta en la actualidad al Cristianismo la teología liberal de Alemania?

Publicado septiembre 01, 2023 y escrito por Laura

CRISTO LES ESTORBA

Comentario del Padre S. Martín FM (Franciscanos de María)

sobre la actualidad de la Iglesia durante esta semana.

• ¿QUÉ ES Y CÓMO SURGE LA TEOLOGÍA LIBERAL?

En el siglo XIX tuvo una gran influencia la llamada "teología liberal". Surgida en el seno del protestantismo alemán, buscaba hacer compatible la fe cristiana con el mundo moderno y para ello eligieron el camino de la ruptura con los dogmas y también con todo relato bíblico que implicara algo extraordinario, como los milagros.

Llegaron a la conclusión de que los Evangelios no tenían rigor histórico y, por lo tanto, que no servían para conocer quién fue en realidad Jesucristo. Reimarus, Lessing, Schleiermacher, Baur, Strauss, entre otros, se dedican a demoler el edificio de la fe cristiana, siempre con el objetivo de hacer aceptable por el mundo lo que quedara de ella. Criticados, sobre todo, por el teólogo calvinista Karl Barth, con su "teología dialéctica", encontraron en otro de sus críticos una valiosa ayuda. Me refiero a Rudolf Bultmann, también alemán y también protestante; para Bultmann, los Evangelios no son relatos históricos, pero con su lenguaje mítico transmiten una verdad, que es lo que importa; por eso Bultmann distingue entre el llamado "Jesús histórico" y el "Cristo de la fe"; para él, el Jesús histórico no tiene importancia porque no fue más que un rabino judío que fue divinizado por San Pablo.

Lo que movía a los teólogos liberales y a los que querían prescindir de la figura histórica de Jesús era no sólo el deseo abstracto de averiguar la verdad, sino una idea preconcebida: hacer aceptable el cristianismo por un mundo cada vez más alejado de la religión y que no toleraba ya nada que fuera sobrenatural, incluida la propia idea de resurrección.

• LA TEOLOGÍA LIBERAL EN LA ACTUALIDAD

Sabiendo esto, no es difícil ver el paralelismo con la situación actual que vive la Iglesia. El gran problema para los teólogos liberales era el Evangelio y, más concretamente, la figura central del mismo: Jesús. Por eso dedicaron tantos esfuerzos a negar su historicidad, despojándole de su divinidad y haciendo de él un hombre virtuoso que fue posteriormente mitificado.

Este "Jesús histórico" no tiene autoridad sobre el hombre y está al mismo nivel de tantos hombres importantes de la historia. El Jesús de los liberales no puede imponer dogmas de fe, simplemente porque es sólo un hombre y lo más que puede hacer es dar consejos y de paso pedir perdón por sus propios errores.

A la vista de esto se entienden dos afirmaciones de esta semana, una de un religioso muy próximo al Papa y la otra de una influyente monja. El primero, comentando el pasaje de la curación de la hija de la mujer cananea, llega a decir que Jesús, en su primera respuesta a dicha mujer, tiene "una caída de tono, de estilo, de humanidad", afirma que "la misericordia no es para él" y que su "dureza es irrompible", añadiendo que Jesús está "cegado por el rigorismo teológico"; termina diciendo que la respuesta de la cananea "convierte" a Jesús, "le cura" y le "hace ser libre de la rigidez de los elementos teológicos, políticos y culturales dominantes de su tiempo".

Es evidente que un Cristo así, que necesita convertirse, no puede ser Dios y, en el caso de serlo, es un Dios cegado por la rigidez de su cultura judía y, por lo tanto, sus enseñanzas -aquellas que no están de acuerdo con lo que el mundo opina- pueden ser dejadas de lado porque son fruto de esa cultura y no son verdaderamente enseñanzas que proceden de Dios.

En la misma línea ha escrito la religiosa, a propósito del sacerdocio femenino, afirmando que el rechazo de Jesús fue fruto de su sometimiento a la cultura machista de su época.

Jesús se ha convertido en el gran enemigo de la "nueva Iglesia". Les molesta. Les incomoda. Obstaculiza sus planes para hacer que el cristianismo se adapte al mundo. Lo mismo que los teólogos liberales dejaron de lado al Jesús histórico, estos rechazan cualquier cosa que se opone a sus objetivos diciendo que era fruto de la cultura judía en la que vivió Cristo y, por lo tanto, que no debe ser tenido en cuenta como si fuera algo procedente de Dios.

La consecuencia no es sólo que se suprimen las enseñanzas morales que a cada uno le incomodan, sino que se termina por negar, de hecho, la divinidad de Jesús, porque ¿cómo puede ser Dios alguien que comete pecados y tiene que convertirse, o alguien que enseña cosas que son malas como si fueran buenas? Dostoievsky tenía razón cuando escribió "El gran inquisidor", pero no hace falta que Cristo vuelva de nuevo a la tierra para ser asesinado otra vez, porque ahora lo que quieren es acabar con su mensaje y para ello no dudan en negar su divinidad, que es una forma de matarle.

Cristo les estorba. Se ha vuelto su enemigo. Tienen que acabar con Él. Sólo nos queda volver a decir lo que gritaban los mártires ante el pelotón de fusilamiento: ¡Viva Cristo Rey!, sabiendo que es probable que eso nos cueste algo más doloroso que la muerte.

• Sobre el Padre Santiago Martín FM:

Sacerdote y escritor español, nacido en 1954. Estudió Biología, Teología Moral y Periodismo. Fundador de los Franciscanos de María, una familia espiritual católica aprobada por la Santa Sede en 2007 cuyo carisma es el agradecimiento.

• Sobre la imagen:

La foto que ilustra la nota no tiene relación con el texto. Todas las semanas en la sección Noticias publicaré una foto diferente de catedrales, iglesias y atrios para poder admirar su belleza