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Por qué y para qué Jesús subió al Cielo? La Ascensión de Jesús al Cielo

¿DÓNDE SE ENCUENTRA JESÚS y CÓMO NOS CUIDA DESDE EL CIELO?

- Material y articulo de religioncatolicaromana.blogspot.com

La Ascensión de Jesús al Cielo es un misterio profundo que revela el amor y el cuidado de Jesús por nosotros. A pesar de su partida física, Jesús sigue presente en la tierra a través de las diferentes manifestaciones de su presencia real.

Su Ascensión nos invita a vivir en gracia de Dios, confiando en su amor y misericordia. Nos da esperanza en medio de las dificultades y nos recuerda que nuestro verdadero hogar está en el Cielo. Que podamos acudir a Jesús, adorarle, acompañarle y pedir su ayuda en nuestra vida diaria, sabiendo que Él siempre estará con nosotros, tanto en el Cielo como en la tierra.

LA ASCENSIÓN AL CIELO

Para entender las diferentes manifestaciones de la presencia del Señor en la tierra, es necesario comprender que, después de su Resurrección, Jesús ascendió al Cielo. Durante su tiempo en la tierra, Jesús solo podía estar en un lugar a la vez. Por ejemplo, la institución de la Eucaristía ocurrió pocas horas antes de su muerte y Jesús la compartió con sus apóstoles. No sería hasta después de la Resurrección que la Eucaristía volvería a ser una presencia real de Jesús. Las diferentes manifestaciones del Señor son manifestaciones del Cristo Resucitado, que llevan consigo no solo la gracia de la compañía de Jesús vivo, sino también la gracia de la propia resurrección.

Desde el Cielo, donde Jesús se encuentra después de su Ascensión, Él sigue cuidando, salvando, defendiendo e intercediendo por la humanidad. Su partida al Cielo no implica una ausencia total, sino una presencia simultánea en la tierra y en el Cielo.

Jesús está con nosotros todos los días hasta el fin del mundo, tanto en el Cielo como en la tierra. Así como se encuentra en el Cielo con su cuerpo glorificado, Jesús también está presente en la tierra en las formas reales en las que decidió quedarse para cuidar de nosotros, consolarnos, iluminarnos y ayudarnos a llevar nuestras cruces diarias y crecer en santidad. Su presencia en la Eucaristía, en la Palabra de Dios, en la comunidad de creyentes y en los sacramentos, es una muestra de su amor constante y su deseo de estar con nosotros en cada momento de nuestra vida.

LA ASCENSIÓN COMO UN ACTO DE AMOR

La Ascensión de Jesús al Cielo no debe verse como una marcha o una huida, sino como un acto supremo de amor. Jesús, al ascender al Cielo, no nos abandona, sino que nos muestra el camino hacia nuestro destino final.

Su partida es un acto de amor que nos permite experimentar su presencia de una manera aún más profunda y significativa. A través de su Ascensión, Jesús nos invita a confiar en su promesa de que siempre estará con nosotros y nos guiará en nuestro camino hacia la santidad.

A pesar de estar en el Cielo, Jesús sigue cuidando de nosotros en la tierra. Su Ascensión no implica una desconexión de la realidad humana, sino una unión aún más profunda. Jesús, desde el Cielo, intercede por nosotros y nos acompaña en nuestras luchas y dificultades.

La Ascensión de Jesús también es una fuente de esperanza para todos los cristianos. Nos recuerda que nuestra vida en la tierra es solo temporal y que nuestro verdadero hogar está en el Cielo. Jesús, al ascender al Cielo, nos asegura que hay un lugar preparado para cada uno de nosotros. Esta esperanza nos da fuerza y consuelo en medio de las pruebas y sufrimientos de la vida, sabiendo que, al final, estaremos unidos a Jesús en su gloria eterna.

PROPÓSITO: ESTAR EN GRACIA DE DIOS PARA ALCANZAR EL CIELO

El propósito principal de comprender dónde se encuentra Jesús después de su Ascensión es recordar que Jesús está en el Cielo y que nosotros debemos esforzarnos por vivir en gracia de Dios. Esto implica confesarnos cuando hemos pecado para poder ir al Cielo con Él cuando llegue nuestra hora. La comprensión de la Ascensión de Jesús nos invita a reflexionar sobre nuestra relación con Dios y a buscar el perdón y la reconciliación a través del sacramento de la confesión. Al vivir en gracia de Dios, nos preparamos para unirnos a Jesús en el Cielo y experimentar la plenitud de su amor y salvación.

Mi nombre es Laura y soy católica apostólica romana.
Siempre me ha gustado estudiar las religiones, pero especialmente me he dedicado al estudio profundo de la fe católica, y consideré que podía ser útil compartir mis conocimientos en forma online.
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Todos los artículos que he escrito están fielmente basados en el Catecismo, la Biblia y los textos reconocidos por la Iglesia Católica Apostólica Romana.
Espero que mi material les sea útil para crecer en la fe católica ✝️
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