6º mandamiento de Dios según la Biblia Explicación y ejemplos según el Catecismo de la Iglesia Católica
El sexto mandamiento dice
"No cometerás actos impuros".
Este mandamiento prohíbe consentir malos pensamientos, malos deseos, hacer actos impuros, tener malas conversaciones, etc.
Por lo tanto los principales pecados contra este mandamiento son los siguientes: el adulterio, la masturbación, la lujuria, la prostitución, la violación, la fornicación, la homosexualidad, leer o mirar pornografía, cantar o escuchar con gusto canciones inmorales, oír con gusto o decir chistes sexuales, el incesto, la poligamia, el concubinato, etc.
Es cometer pecados de impureza una persona soltera con otra persona también soltera.
Los novios deben reservar para el matrimonio las manifestaciones de ternura propios del amor conyugal ayudándose mutuamente a crecer en castidad.
Es hacer actos de sexualidad una persona casada con otra que no sea su consorte, siendo este pecado de tal gravedad que en la antigüedad la Biblia mandaba matar a pedradas a la persona que cometía dicho pecado.
Es manipular los órganos sexuales para obtener placer.
Para emitir un juicio justo sobre la responsabilidad moral de los sujetos ha de tenerse en cuenta la inmadurez afectiva, la fuerza de los hábitos contraídos, el estado de angustia u otros factores síquicos o sociales que pueden atenuar o tal vez reducir al mínimo la culpabilidad moral.
El gran problema de la masturbación es que se va convirtiendo en costumbre y luego de un tiempo será muy difícil quitársela.
Es cometer pecados de impureza con personas del mismo sexo.
Gran número de hombres y mujeres presentan tendencias homosexuales instintivas que no han sido elegidas deliberadamente, y en muchos casos esta tendencia les resultó una prueba o sufrimiento.
La Iglesia pide que sean tratados con respeto evitando toda demostración de discriminación o separación injusta, ya que todos somos hermanos, seamos homosexuales o heterosexuales.
Y además aconseja a los homosexuales que unan al sacrificio de Jesús en la cruz las dificultades que encuentren por su inclinación sexual y que practiquen la castidad, ya que esto puede llevarlos a la perfección cristiana.
Es un regalo, don o carisma de Dios que el Espíritu Santo puede conceder.
La castidad es una virtud, un fruto del trabajo espiritual que se obtiene pidiendo frecuentemente por él, evitando las ocasiones peligrosas, asistiendo frecuentemente a misa, confesándonos, comulgando, siendo devotos de la Santísima Virgen, evitando todo tipo de lectura sensual, etc.
Es el deseo o goce desordenado del placer sexual.
Aquellos que practican la prostitución pecan gravemente contra sí mismos porque quebrantan la castidad manchando su propio cuerpo que es templo del Espíritu Santo.
Es algo que va contra la dignidad humana.
Es obligar por la fuerza a la intimidad carnal, yendo contra la justicia y la caridad y produciendo un daño gravísimo que puede marcar a la víctima de por vida.
Esto es muchísimo más grave si la violación es por parte de un educador o un familiar (incesto), como por ejemplo, el propio padre.
Es la unión libre, o sea una pareja que vive sin casarse.
Esto es una burla a la dignidad del matrimonio e implica poca seriedad hacia la fidelidad.
Es un pecado grave