NUEVO!

Explicación lecturas Misa 6º Domingo Pascua ciclo B, reflexión, propósito, lecturas completas

5 de mayo de 2024 Textos litúrgicos oficiales del Misal Romano de la Conferencia Episcopal Española Propósito semanal, reflexión, comentario, lecturas completas del día y links a Misa completa en español o inglés VI Domingo de Pascua del Ciclo B Vence el mal a fuerza de bien

6º Prueba de que Jesús es Dios: Curaba el alma perdonando pecados

6º EVIDENCIA: LA ESENCIA DIVINA DE CRISTO Y SU CONCIENCIA AUTODECLARADA COMO DIOS

Continúo en este artículo con la sexta de las diez razones o pruebas, explicadas de forma fácil de entender y detalladas, sobre por qué los católicos decimos que Jesús es Dios y no un hombre común que fue un visionario, un pacífico o simplemente "un buen hombre".

Otro aspecto esencial de la divinidad de Cristo es la conciencia que el propio Cristo tenía de ser Dios. Este es el séptimo argumento.

Hay muchos momentos en la vida de Jesús donde Él no sólo se muestra como Dios -cuando hace milagros, por ejemplo-, sino que se nos muestra plenamente consciente de su divinidad.

Un ejemplo es cuando le dice al paralítico "levántate y anda, tus pecados te son perdonados" y, al hacerlo, suscita la ira de sus enemigos que dicen, con razón, que nadie puede perdonar pecados excepto Dios.

El Señor, lo reconoce también así y demuestra su divinidad y la conciencia que tiene de ella, curando a continuación al paralítico (Mateo 9, 1-8)

Subiendo a la barca, pasó a la otra orilla y vino a su ciudad.

En esto le trajeron un paralítico postrado en una camilla. Viendo Jesús la fe de ellos, dijo al paralítico: «¡ Animo!, hijo, tus pecados te son perdonados.»

Pero he aquí que algunos escribas dijeron para sí: «Este está blasfemando.»

Jesús, conociendo sus pensamientos, dijo: «¿Por qué pensáis mal en vuestros corazones? ¿Qué es más fácil, decir: "Tus pecados te son perdonados", o decir:

"Levántate y anda"?

Pues para que sepáis que el Hijo del hombre tiene en la tierra poder de perdonar pecados - dice entonces al paralítico -: "Levántate, toma tu camilla y vete a tu casa".»

El se levantó y se fue a su casa.

Y al ver esto, la gente temió y glorificó a Dios, que había dado tal poder a los hombres.

Cristo es Dios y lo sabe. Es Dios y ejerce de Dios, por eso perdona pecados lo mismo que hace milagros, sin miedo a lo que digan o a las fatales consecuencias.

Un hombre común no se arriesgaría a tanto sabiendo que como mínimo corría riesgo de ser apedreado, jugaría un poco a hacerse el Dios, pero no tocando un tema tan delicado para los judíos como el perdón de los pecados.

Una cosa y la otra, o sea los milagros físicos y el perdón de los pecados, son signos de su divinidad y ambas son pruebas de su infinita misericordia, pues el milagro curaba la enfermedad del cuerpo y el perdón curaba el cáncer que mataba el alma.

  • LAS 10 PRUEBAS QUE DEMUESTRAN LA DIVINIDAD DE CRISTO
  1. La propia resurrección de Cristo es la prueba definitiva de su divinidad

  2. Su testimonio

  3. Los milagros que hacía

  4. La muerte en la cruz

  5. Su poder sobre la muerte

  6. La conciencia que el propio Cristo tenía de ser Dios (éste artículo)

  7. El motivo por el cual Jesús fue condenado a muerte

  8. El poder que tenía sobre los demonios

  9. La calidad de sus enseñanzas

  10. La fe de los que fueron testigos de la resurrección

MIS REDES
 Sígueme en Facebook  Sígueme en Twitter  Mi Feed RSS
Mi nombre es Laura y soy católica apostólica romana. Siempre me ha gustado estudiar las religiones, pero especialmente me he dedicado al estudio profundo de la fe católica, y consideré que podía ser útil compartir mis conocimientos en forma online. En el link de "Sobre mi" pueden conocerme más. Todos los artículos están fielmente basados en textos reconocidos por la Iglesia Católica Apostólica Romana.
Calendario

Hoy es :

LOS MÁS LEÍDOS ESTA SEMANA

Caridad, virtud teologal cristiana: Ejemplos

Supersticiones: Ejemplos que se oponen a Dios con explicaciones

Credo explicado frase por frase: Significado Creo en Dios Padre Todopoderoso creador del cielo y de la tierra